En las sierras de Caurel-Oribio se está recuperando considerablemente la población de oso pardo. Este animal habita las zonas más inaccesibles, los bosques y montañas de vegetación pura donde todavía no ha sido estropeada por la mano del hombre ni por algún tipo de contaminación. Para el oso la miel representa la mayor de las golosinas. Durante la pasada Semana Santa nos destrozó totalmente un colmenar. Le perdonamos porque esta circunstancia representa una garantía de la extraordinaria pureza de la vegetación que nos rodea.
En La Voz de Galicia se hacen eco de este hecho, aunque existe una errata con nuestro nombre (Terras de Asma en lugar de Terras de Samos). Puedes leer la noticia en el siguiente enlace: